Planes para recorrer esta comunidad autónoma de norte a sur y de este a oeste disfrutando de una rica oferta de ocio: submarinismo, observación de estrellas, senderismo y mucho más.
El verano es la época de despojarnos de obligaciones y reconectar con todo aquello que nos hace sentir bien. Pasar tiempo en la naturaleza es una de las formas más sencillas de llenarnos de energía, y aunque el mar es por defecto el destino habitual en estos meses, el interior también nos ofrece un sinfín de planes por descubrir.
En este listado recorremos algunos de los puntos más especiales de Catalunya para abrazar la naturaleza de forma responsable desde el mar hasta la montaña mediante planes de ecoturismo.
Contemplar el cielo del Pirineo desde el Parc Astronòmic del Montsec
Alzar la vista al cielo y disfrutar de una atmósfera estrellada no ocurre todos los días. Los entornos urbanos suelen dinamitar este espectáculo. Por eso, donde la naturaleza despliega toda su magia es en los rincones rurales. El Parc Astronòmic del Montsec es uno de ellos. Considerado el segundo lugar del mundo en recibir la doble certificación de Reserva y Destino Turístico Starlight, es el mejor enclave para observar el cielo en Catalunya.
El Parc cuenta con un equipamiento líder: una nueva sala multimedia y un modelo de simulación de estrellas para navegar virtualmente por el espacio en 2 y 3 dimensiones. Además, ofrece el mayor formato audiovisual del mundo con producciones 6K para ver de cerca los astros. También organizan actividades como la experiencia nocturna, la diurna o un ciclo de música en directo bajo las estrellas que tendrá lugar del 27 de julio al 23 de noviembre.
Descubrir la fascinante vida de las abejas en la Costa Daurada
Al sur de Catalunya, en el paisaje tan espectacular que nos ofrecen las Montañas de Prades, cada día cientos de abejas polinizan el entorno. Adentrarse en su mundo requiere tiempo y dedicación, dos ingredientes que caracterizan el ritmo de vida de la zona. Una extensión de territorio que nos permite descubrir los alrededores del pueblo de Alcover y el valle del Glorieta.
Organizada por El Brogit, esta ruta nos ofrece una excursión para descubrir el entorno en el que viven y producen la miel las abejas de la zona. A continuación se visita el taller de Joan Maria Llorenç, apicultor artesano y miembro de la Asociación de Amigos de las Abejas de las Montañas de Prades. Finalmente se ofrece una cata de miel artesanal.
Adentrarse en el arrozal interactivo de Terres de l’Ebre
Sin salir de la zona del sur, uno de los mayores tesoros es recorrer la belleza del paisaje que nos ofrece el Delta del Ebro. Bañada por arrozales y poblada de un rico ecosistema de aves, este territorio Reserva de la Biosfera es uno de los más especiales de Catalunya. Allí, en pleno Parque Natural encontramos un arrozal interactivo que nos invita a experimentar con la sensación de pisar su suave barro, oler el arroz y contemplar de cerca la espiga madura.
Ubicada en el paseo fluvial de Sant Jaume d’Enveja, se trata de una experiencia de dimensiones reducidas a la que se accede por una pasarela de madera.
En este mismo arrozal tiene lugar la Fiesta de la Plantada, un acontecimiento popular en el que los plantadores llegan con las gavillas y poco a poco las van introduciendo en el barro. El fin de este ritual llega unos meses más tarde con la Fiesta de la Siega, en la que se segará el arroz maduro.
Recorrer el pueblo medieval de Rupit hasta los acantilados de Collsacabra
Practicar senderismo es una de las formas más bonitas de estar en contacto con la naturaleza. Aún más si a eso le añadimos uno de los pueblos más singulares de Catalunya: Rupit. Se trata de una pequeña localidad medieval que data del siglo XVI. Es famosa por su puente colgante, la iglesia de Sant Miquel, su pintoresca Plaza Mayor o el mítico Carrer del Fossar.
Rupit forma parte del Espacio Natural Protegido del Collsacabra, una zona que ofrece varias rutas de senderismo entre arroyos y bosques frondosos. Está colgada sobre los acantilados del Collsacabra, un balcón natural que brinda unas espectaculares vistas al pantano de Susqueda y sus alrededores. En esta ruta en concreto también se pasa por el famoso Salto de Sallent, la cascada más alta de Catalunya, con una caída de 115 metros.
Sumergirse en las aguas de la Costa Brava con una eco-guía
El submarinismo nos brinda la oportunidad de adentrarnos en el océano, pero también de conectar de forma profunda con sus animales. Una conexión íntima a la que podemos acceder fácilmente: en L’Estartit, uno de los rincones más valorados de la Costa Brava, encontramos el eco-bautizo de El Rei del Mar. Consta de una explicación teórica sobre las bases del buceo, una práctica en la piscina para habituarse a respirar bajo el agua y finalmente una inmersión en una zona resguardada y poco profunda de la Costa del Montgrí.
Durante la salida al mar, los instructores de buceo proporcionan herramientas para llevar a cabo una salida ecológica que respete el medioambiente. Sin duda, una de las formas más especiales de acercarnos a la fauna marina y dejarnos maravillar por su belleza.