Ebano y Mirra son las dos nuevas fragancias que Acqua di Parma ha añadido a su Ingredient Collection, un viaje sensorial que reinterpreta la clásica Colonia, ya convertida en icono.
Desde esa primera Colonia en 1916, la firma ha evolucionado con nuevas fragancias y productos olfativos pero sin perder ni un ápice de su elegancia artesanal italiana. El mito Acqua di Parma creció junto al de la moda italiana caminando de la mano. Un soplo de Colonia vaporizado en el tejido antes de entregar el traje hecho a medida era el último gesto de sofisticación de las prendas que viajaban hasta el mismísimo Hollywood.
Así se labró la fama que aún hoy conserva y que lleva por bandera un estilo verdadero, vívido, individual. Basado en una elegancia susurrada y sutil, justo como la de Colonia, el clásico destinado a un éxito imperecedero y que ha conservado la misma composición desde su creación, alterada únicamente para la creación de Ingredient Collection.
Con esta colección, Acqua di Parma emprendió en 2012 una nueva aventura que la ha llevado a recorrer distintas geografías olfativas. Un viaje sensorial de esencias originales e ingredientes que narran la historia de un viaje de matices sorprendentes. Un recorrido a lo largo del cual, Colonia, el perfume icono de Acqua di Parma selecciona los ingredientes más raros y evocativos para reinterpretarse a sí misma y crear composiciones olfativas inéditas, manteniendo intacto y reconocible su carácter.
Oud, Leather, Ambra y Quercia, primeras paradas del viaje de Acqua di Parma
Ingredient Collection viaja a través de un mapa delineado a lo largo del tiempo y del espacio. De Oriente Medio recupera los matices de la arena, los cielos ardientes y el alma de una antigua cultura de aromas y especias. Una fragancia que mezcla sugestiones modernas con tradiciones milenarias y en la que el magnético y sensual aceite de madera de Agar se encuentra con la elegancia de las notas cítricas de Colonia, dando lugar a Colonia Oud.
De vuelta a Italia, el recorrido pasa a través de aldeas enclavadas en las colinas toscanas, con caminos de piedra y viejas casas donde desde los bajos emana el olor del cuero artesano. Ese aroma inconfundible y cálido símbolo de la tradición de la artesanía italiana impregna las notas cítricas de la Colonia Leather.
Y de nuevo sorprende el deseo de volver a partir allí donde la personalidad fresca y solar de Colonia pueda unirse con un aroma nuevo. En esta ocasión el viaje comienza de Venecia hasta Damasco, Bucarest o Samarcanda o hasta China e India y de regreso a la ciudad de los dogos siguiendo la ruta emprendida por Marco Polo por los orígenes de la perfumería para recuperar uno de sus más preciados secretos: el ambar gris. Un ingrediente difícil de encontrar que los perfumeros venecianos introducían en las fragancias de los nobles. Acqua di Parma introduce sus notas saladas y almizcladas en la Colonia Ambra.
Y, de aquí, a otras dos etapas italianas que comienzan en el Piamonte, con sus aristocráticos palacios y bosques de majestuosas encinas por los que pasear al alba. La Colonia Quercia se vale de este preciado árbol, símbolo de la protección y vigor de su tronco imponente y su abundante copa bajo la que resguardarse a la sombra. Colonia se reinterpreta así en una composición generosa y potente como el árbol en el que se inspira.
Últimas incorporaciones: Colonia Ebano y Colonia Mirra
El viaje olfativo de Colonia comienza de nuevo con dos nuevos destinos que han desembocado en el lanzamiento de Colonia Ebano, inspirada en los talleres de ebanistería escondidos en la ciudad de Milán, y Colonia Mirra, que camina entre los horizontes lejanos y las montañas del Camino de los Reyes hacia el Lejano Oriente.
En su primera parada italiana, Milán, con sus ritmos, sus prisas y sus luces también ofrece la calma e intimidad de los estrechos callejones de su barrio antiguo. En ellos, apartados y silenciosos, los viejos talleres de los ebanistas huelen a cera de abejas, con la que el ebanista acaricia suavemente las maderas hasta hacerlas resplandecer, y a los aromas penetrantes del ébano. De nuevo una historia sobre la artesanía italiana, de la que Acqua di Parma es un máximo exponente.
El ébano, madera exótica y perfumada de gran valor, se trabaja en los talleres hasta convertirse en una materia dúctil en manos de los artesanos junto con otros materiales como la caoba, el palisandro o el nogal. El alma solar y fresca de Colonia encuentra en el calor natural de las maderas más preciadas y los aromas arrulladores de la miel su compañía perfecta.
Una fragancia suntuosa y al mismo tiempo fresca y luminosa. En su salida, las notas cítricas de bergamota y petit grain. En su corazón, la sofisticada intensidad del aceite de elemí se une a los acentos especiados de pimienta rosa, abriendo paso a la voluptuosidad del acorde de ébano, con sus notas cálidas y cremosas. El equilibrio de la fragancia se concluye impecablemente en su fondo, con las notas suaves de la miel, en un envolvente contraste con los acentos aromáticos de vetiver y las notas balsámicas del pachuli.
Y, de nuevo en esta ocasión, se vuelve irresistible viajar hacia horizontes lejanos. En el atardecer de Muscat, las callejuelas y ventanas se cubren de lámparas incandescentes en las que el incienso y la mirra emanan sus vibrantes perfumes. Las largas caravanas atraviesan la ciudad cargadas con especias, aromas y esencias que impregnan el viento a su paso. Tras montañas, llanuras e interminables desiertos en un viaje incansable, alcanzan el Mediterráneo.
La mirra cuenta una historia milenaria, la misma que Acqua di Parma cuenta ahora en Colonia Mirra. Los egipcios ya la usaban para realizar el Kyphi, el perfume de los faraones. Los griegos la mezclaban con el vino para aromatizarlo. Las mujeres de Oriente la siguen usando para preparar cosméticos de efectos rejuvenecedores. Mientras que en China, la medicina tradicional la emplea por sus virtudes tanto terapéuticas como de carácter sagrado.
Aún en la actualidad, la mirra se extrae a mano de la planta de commiphora. Ya desde los orígenes de la perfumería, la elaboriosa producción de la mirra hace de ella un ingrediente especialmente precioso. Su aroma balsámico y envolviente añade a la transparencia luminosa de Colonia una sugestiva complejidad que se deja descubrir poco a poco, como una caravana que avanza lentamente en el desierto.
El estilo italiano de Colonia se aprecia en sus notas cítricas de salida; mandarina, limón y petit grain, a las que les sigue un corazón único en el que los delicados aromas de flor de naranjo y los acentos especiados de nuez moscada se unen a la calidez del aceite de mirra. Y precisamente en el corazón de esta magnética composición olfativa, la mirra revela sus primeros matices. En una evolución magnífica, el fondo combina las notas envolventes del pachuli con las balsámicas de la resina de mirra, revelando el alma sofisticada de esta nueva Eau de Cologne Concentrée.
Las Colonias Ébano y Mirra acaban de presentarse en Dubai para unirse a las que ya formaban parte de la historia de Acqua di Parma y su Ingredient Collection. Un exclusivo evento para el que la firma ha escogido el desierto, quizás como nuevo punto de partida para continuar el largo recorrido de olores y sensaciones en el que lleva años inmersa.
Acqua di Parma capta así el alma de culturas y ambientes lejanos y cercanos y los plasma en perfumes evocativos.