Escrito por: Mar Cinca
Es el nuevo restaurante del que toda la escena de Londres está hablando. Kate Moss, Goldie Hawn y Rita Ora asistieron a su inauguración, y está lleno de referencias a celebrities, des del diseño realizado por el Martin Brudnizki Design Studio, a las lámparas y esculturas creadas por el maravilloso arquitecto Frank Ghery y el arte de Damien Hirst y Michael Roberts.
Se trata de la última adquisición del holding de la familia Caprice, un evento muy esperado y que no dejó indiferente a nadie.
Sexy Fish, tal y como su nombre indica, es un restaurante donde lo que prima es la carta de sushi y marisco, no obstante, no debemos olvidar su selección de postres o los creativos cocktails, que llevan atados al vaso pequeños proverbios asiáticos.
Aunque su carta está llena de productos excepcionales, el verdadero protagonista, es, sin duda, el diseño interior. El Martin Brudnizki Design Studio se ha encargado ya de otros locales de Caprice, pero realmente sorprendió con el diseño de Sexy Fish. Ellos lo definen como glamour de mediados del siglo XX; nosotros podemos considerarlo muy del estilo del Gran Hotel Budapest. Tiene un aire muy lujoso, gracias a los asientos de piel color frambuesa, los pilares revestidos de madera oscura y los suelos de ónice color esmeralda. Y el que se lleva la palma es el sorprendente techo, con un mural de Michael Roberts (director de moda y estilo de Vanity Fair) que representa un arrecife de coral.
En el bar se despliega una escena más buliciosa, con un estilo inspirado por los American diners, en un diseño color salmón con piedra volcánica. Es donde encontramos 20 lámparas de peces koi creadas por Frank Ghery, y sujetalibros de bronce en forma de sirenas diseñados por Damien Hirst. También es donde se aloja el reluciente cocodrilo de Frank Ghery.
Para mantener la intimidad en un espacio tan amplio, lo han divido en pequeñas áreas con banquillos curvados y medias paredes; de manera que aun ser espacios divididos, puedes disfrutar de la globalidad del espacio en todo momento.
Ofrecen también una alternativa más privada, en el piso inferior. Accesible a través de una escalinata de ónice esmeralda, encontramos un ambiente decorado en verde azulado, dorado y aqua; enlazado con el comedor central gracias a diseños en ónice, cristal y cobre. Se llama la habitación del Arrecife de Coral dado su impresionante decoración con las peceras de arrecife de coral vivo más grandes del mundo. Todos los detalles contribuyen a ofrecer un ambiente imponente a la vez que relajante, como el océano.
Normalmente, el bombo que acompaña la apertura de un nuevo restaurante es infundado, pero en este caso corresponde completamente con la realidad. Podéis visitar Sexy Fish en Berkeley Square House, London.